EL SUTIL ARTE DE DISPARAR UNA PISTOLA INVISIBLE
¿Cómo no hacer una apología del arma, de la violencia que conlleva? ¿cómo no pensar en la violencia? Sobretodo por el contexto, no solo de México, sino del mundo en general. Al no disponer de una idea concreta, surgió la interrogante: ¿Cuál es mi relación con un arma? En realidad no he estado en contacto con una, desconozco su peso, la sensación que produce al tacto, mucho menos el efecto que puede producir dispararla. Por lo tanto, no cuento con certezas en cuanto a un arma, descubro que lo que se de ellas se basa en el imaginario producido por imágenes periodísticas y por el cine. Inevitablemente recordé las armas de fuego de las caricaturas que veía cuando niño. Supongo que muchas personas pasan por la misma situación, así como a mí, la espectacularización del uso de armas de fuego, ha normalizado en nuestro imaginario su existencia.
Si pensamos que una arma es un objeto diseñado para producir daño, este tiene implícita una violencia, por lo que, es realmente sorpresiva la sofisticación que puede alcanzar tanto en su idealización como en su concreción material, la elaboración de tales objetos. Por otro lado, resulta interesante plantearse que cualquier objeto en medio de una situación excepcional, podría funcionar como un arma. Estas dos situaciones dan sentido a un arma, al mismo tiempo que permiten entre- ver que el acto violento no esta en el objeto sino en quién esta detrás de él. Pero de igual manera ambas dan una respuesta creativa, esta última premisa me llevo a crear un archivo de imágenes obtenidas de internet, en donde comparten espacio elaborados diseños de armamento, armas de juguete, imágenes de destrucción masiva producto de armas, actos circenses, dibujos animados en donde un arma produce hoyos por donde se escapa el agua que bebe el personaje, resorteras, armas caseras, armas letales, gestos y gente disparando o siendo encañonada, referentes cinematográficos, del mundo del deporte, fotografías periodísticas, imágenes que muestran el poder destructivo de las armas, así como un insospechado carácter lúdico. Con este archivo elaboré 9 imágenes, cada una esta formada por la yuxtaposición de dos imágenes, donde se muestra una breve selección de esta inventiva humana para el desarrollo y usos de un arma.
Por otro lado, teniendo como referencia un video donde Marcel Marceau realiza el gesto de disparar a unos patos de un local de feria, complementa la pieza un video en loop, proyectado a escala humana, en donde en el fondo aparece un solitario personaje, se aproxima hacía el público y realiza el gesto de sacar un arma y disparar hacía el público, rompiendo e silencio el sonido de los disparos. A diferencia de las imágenes el video es simple, elaborado con pocos recursos, al no haber un arma visible, reconocemos que la violencia no viene de un objeto, sino de quién hace uso del mismo, por lo tanto, podría venir de cualquier persona.
